(Con información de EFE e imagen de MEXSPORT)

Desde hace tres años y tres meses, cuando conquistó la Supercopa de Europa contra el Real Madrid el 15 de agosto de 2018, no era campeón de ninguna competición el Atlético de Madrid de Diego Simeone, reencontrado con lo más indiscutible de todo, los títulos, ya por el octavo en nueve años y cinco meses.

La segunda liga del técnico argentino al frente del banquillo rojiblanco, después de la lograda en 2013-14, que se suma a la Copa del Rey de 2012-13, a la Supercopa de España de 2014, a las dos Ligas Europa de 2011-12 y 2017-18 y a las dos Supercopas de Europa de 2012 y 2018, contra el Chelsea y el Real Madrid, respectivamente.

Todo concentrado en la era Simeone, en los nueve años y cinco meses que ha recorrido por ahora como entrenador del Atlético, desde que llegó hasta ahí entre la crisis del conjunto rojiblanco, eliminado entonces por un Segunda B y en una posición menor en la clasificación de la Liga mientras rebuscaba el sitio de su historia, y el anhelo del ‘Cholo’ de marcar una época con el club madrileño.

Simeone dirigía en una segunda etapa al Racing de Avellaneda, el equipo en el que pasó de jugador a entrenador sin pausa en 2006, cuando todo es se conjuntó en diciembre de 2011 para el desafío más grande de su carrera como técnico, el Atlético de Madrid, uno de los equipos de su vida, al que se preparó años para llegar algún día.

Nueve años y cinco meses después, nadie ha ganado más títulos que él como entrenador del Atlético. Ni nadie ha vencido más partidos que él. Ni siquiera Luis Aragonés, un mito, uno de los futbolistas y técnicos más grandes de los 118 años de existencia del club, una leyenda formidable, a la que ha superado en el banquillo Simeone.

La Liga de esta temporada agranda su recorrido, ya de por sí gigantesco en el Atlético, al que ha posicionado de nuevo entre los grandes, a la altura de su historia, en el sitio que lo pertenece, pero del que se olvidó durante la primera década del siglo XXI o durante los últimos años de los 90, cuando fue relegado a Segunda.

En cuatro meses y medio ya había ganado su primer título con el Atlético: la Liga Europa. El 9 de mayo de 2012, en el estadio Nacional de Bucarest, venció la final por 3-0 al Athletic Club, con un Radamel Falcao estelar. El atacante colombiano decidió la final con dos goles decisivos de un triunfo culminado por Diego Ribas.

El segundo data del 31 de agosto de 2012: la Supercopa de Europa, en el estadio Luis II de Mónaco. De nuevo con un formidable e incontestable Falcao -hoy en el Galatasaray- superó de forma magnífica al Chelsea, con un encuentro imponente de todo el equipo, pero especialmente del goleador, imborrable en el club madrileño.

El Atlético venció por 1-4. El primer tiempo ya ganaba por 0-3, con un ‘triplete’ del ‘9’ colombiano. El brasileño Joao Miranda anotó el cuarto en el segundo tiempo, mientras que Gary Cahill logró el tanto de un Chelsea desbordado prácticamente de principio a fin.
El salto del Atlético, en cualquier caso, lo promovió el tercer título, al año siguiente, cuando el equipo se sintió ya capaz de cualquier desafío, de ganar a cualquiera en cualquier escenario: la Copa del Rey del 17 de mayo de 2013 en el estadio Santiago Bernabéu.

Frente al Real Madrid, en la prórroga, el grupo dirigido por Simeone se impuso por 1-2. El gol definitivo fue de Miranda, que cabeceó un centro de Koke Resurrección, después del empate a uno con el que habían terminado los 90 minutos reglamentarios de resistencia rojiblanca, en los que igualó por medio de un gol de Diego Costa.

El más grande, aun así, fue culminado justo un año después, el 17 de mayo de 2014, con un empate a uno en el Camp Nou con el testarazo para la historia de Diego Godín en la última jornada: la Liga 2013-14. Anhelada desde hacía 18 años antes, la temporada fue memorable, con el Atlético vencedor del duelo que sostuvo durante todo el torneo con el Real Madrid y el Barcelona. Sumó 90 puntos.

Le siguió luego la Supercopa de España ante el Real Madrid, en 2014, con un 1-1 en el Santiago Bernabéu y un 1-0 en el Vicente Calderón, transformado por Mario Mandzukic nada mas comenzar el encuentro a pase de Antoine Griezmann, y después cuatro años de sequía, hasta la Liga Europa del 16 de mayo de 2018 en Lyon frente al Olympique Marsella, con dos goles de Antoine Griezmann y uno de Gabi Fernández, y la Supercopa de Europa frente al Real Madrid del 15 de agosto de 2018 en la prórroga, con dos dianas de Diego Costa, una de Saúl Ñíguez y una de Koke Resurrección. Y hoy ganó otra Liga.