El Gran Premio de Mónaco corona a Charles Leclerc

En un día para la historia de Mónaco, Charles Leclerc largó desde la pole y lideró de inicio a fin el Gran Premio que tanto se le había negado.

La sexta fue la vencida para el príncipe de Mónaco. Abandonos en 2018, 2019; sin poder salir en 2021, una pole desperdiciada en 2022 y un sexto lugar en 2023; fueron los amargos tragos que tuvo que pasar Leclerc antes de vivir el triunfo más emotivo de su carrera.

No podía ser de otra manera. Estaba escrito que Il Predestinato se convirtiera en el primer monegasco en ganar el Gran Premio de Mónaco en la que fue su edición número 70 en Fórmula 1. Un triunfo tan emotivo para Leclerc como ningún otro y que llevó a las lágrimas al príncipe Albert II, así como a todo el mundo del automovilismo.

«No hay palabras que lo puedan describir. Significa mucho (para mí), es la carrera que me hizo soñar en convertirme en piloto de Fórmula 1. Tengo que decir que, pensaba mucho en mi papá, más de lo normal. Obviamente, dio todo para que yo estuviera aquí y era un sueño nuestro que corriera aquí y que ganara, así que… es increíble», expresó un Leclerc que a la par liberó y contuvo todas las emociones.

Un triunfo que, para sumarle aún más emociones, llega exactamente diez años y un día después de que Jules Bianchi, padrino de Leclerc, cosechara sus primeros puntos como piloto de Fórmula 1.

La victoria de Leclerc, sexta en su carrera, llegó para firmar un fin de semana perfecto para Ferrari, que tuvo con el monegasco su pole position número 250, triunfo 245; y que vio a Carlos Sainz llegar en tercer lugar, únicamente siendo separados los tifosi por el McLaren de Oscar Piastri.

Una tarde de 26 de mayo que quedará escrita en letras de oro en la historia de Mónaco.

El Gran Premio de Mónaco

Fue un accidentado Gran Premio el que le permitió al de casa hacerse con el triunfo. Un estrepitoso y espeluznante choque de Kevin Magnussen a Checo Pérez al salir de la primera curva en la primera vuelta obligó a que la carrera se viera reiniciada con una bandera roja.

«Lo más importante de hoy es que todos podemos regresar a casa. Fue un accidente muy fuerte y totalmente innecesario desde mi punto de vista», expresó el piloto mexicano respecto al choque que forzó su salida, junto con la de Magnussen y Hülkenberg.

Nada positivo el fin de semana para Red Bull, que vio a Checo caer de la tercera a la quinta posición y a Verstappen sumar apenas ocho puntos tras llegar sexto.

El reinicio resultó vital para Ferrari, que había visto a Carlos Sainz pasarse de largo en la curva 4, lo que lo hubiera mandado del tercer al último puesto, dejando a Leclerc solo contra los McLaren. Pero el reinicio de la carrera permitió a Sainz mantener su posición y a los equipos cambiar de neumáticos, montando en su mayoría duros, mismos con los que finalizarían la carrera.

Un Gran Premio que, como ha sido costumbre, no tuvo adelantamientos. Siendo esta la primera vez en la historia de la Fórmula 1, que los primeros diez lugares finalizan en el mismo orden de salida.

El triunfo de Leclerc le permite a la Scuderia pelear por todo en ambos campeonatos.

Son tan solo 31 puntos los que separan al monegasco (138) de Max Verstappen (169) y tienen a Carlos Sainz (108) a un paso de arrebatarle el tercer puesto en el Mundial de Pilotos a Lando Norris (113); mientras que en el de constructores, están a tan solo 24 puntos de alcanzar a Red Bull (276)

De igual manera, una tarde muy positiva para McLaren, que cerró en el segundo puesto con Oscar Piastri y en cuarto con Lando Norris, reafirmando el extraordinario momento que vive el equipo.

Después de ocho fechas en el calendario, hacía mucho tiempo que no se veía una competencia como esta en la categoría reina del automovilismo, que tiene a sus más grandes protagonistas luchando por toda la gloria en un campeonato que está al rojo vivo.

Por Jaime Gómez Torres e imagen de Gabriel Ayala/ACIR Deportes