Una resonancia magnética confirmó este lunes el peor escenario para Brandon Aiyuk, receptor estelar de los San Francisco 49ers que se perderá lo que resta de la temporada 2024 de la NFL por la rotura de ligamentos cruzados anterior y colateral medial de la rodilla derecha.
Aiyuk aún será sometido a más pruebas para saber si presenta otros daños en la rodilla. En cuanto se tengan todos los resultados será programado para una cirugía después de la cual le espera un largo tiempo de recuperación de cara a la temporada 2025.
La lesión del receptor de 26 años ocurrió el domingo pasado durante el partido en el que los gambusinos cayeron ante los campeones Kansas City Chiefs.
El jugador se lesionó en el último minuto de la primera mitad, luego de recibir un envío de Brok Purdy, al querer ganar yardas fue impactado por dos defensivos.
Primero fue detenido por Trent McDuffie, pero en su lucha por seguir avanzando, Aiyiuk fue impactado por Chamarri Conner a la altura del muslo, golpe que hizo palanca ya que la pierna derecha de Brandon estaba apoyada y su rodilla se dobló de manera dramática hacia atrás.
El receptor nacido en Rocklin, California, que fue seleccionado en la primera ronda del Draft 2020 es una de las armas principales en la ofensiva del entrenador en jefe del equipo Kyle Shanahan.
Gracias a sus actuaciones, en agosto pasado acordó una extensión en su contrato de cuatro años por 120 millones de dólares.
La baja de Brandon Aiyuk se une a las ausencias de sus otras tres estrellas ofensivas, Jauan Jennings y Deebo Samuel, que completan la primera línea de receptores y el corredor Christian McCaffrey, quien se distingue por su fuerza en el ataque terrestre y su versatilidad para convertirse en un objetivo por la vía aérea.
Las graves lesiones que dejó la semana 7 no sólo afectaron a los 49ers.
Más temprano se anunció que Braxton Berrios, receptor de los Miami Dolphins también se rompió el ligamento cruzado anterior y se perderá el resto de la temporada.
En Cleveland, Deshaun Watson, quarterback principal de Browns, también vio fin a su actividad en el año por un desgarro en el tendón de Aquiles.
Y DK Metcalf, receptor de Seattle Seawaks, sufrió un esguince de ligamento colateral medial grado 1, aunque estará fuera unas semanas está considerado para volver a jugar en la campaña.
Con información de EFE e imagen de wolterke/Depositphotos.com
