Rusia advirtió de nuevos ataques en Kiev, capital de Ucrania, por lo que pidió a los habitantes abandonar su hogar.

Momentos después, misiles rusos fueron lanzados contra la torre de televisión de la ciudad, dejando cinco muertos e igual número de heridos, informó el Servicio Estatal de Emergencias ucraniano.

Por su parte, la Policía Nacional informó que un proyectil impactó contra un edificio administrativo de cuatro plantas, situado junto a la torre de televisión de Kiev, provocando una explosión e incendio.

Los bombardeos rusos también alcanzaron el edificio de la administración regional de Járkov, la segunda ciudad más grande de Ucrania, así como un edificio de viviendas.

Ante el recrudecimiento de los ataques de la aviación rusa, se endureció el toque de queda en esa ciudad, por lo que estará prohibido estar en la calle o viajar en auto entre las 16:00 y 6:00 horas.

El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, denunció que los ataques rusos no cesaron ni durante las conversaciones de paz y calificó como “crimen de guerra” los bombardeos de Járkov, donde no hay objetivos militares.

Y en un dramático pedido de apoyo a los líderes europeos, Zelenski solicitó la adhesión inmediata de Ucrania a la Unión Europea.

“Europa será más fuerte con Ucrania en su seno. Sin ustedes, Ucrania estará sola. Nosotros hemos probado nuestra fortaleza. Por eso, prueben que están con nosotros, prueben que no nos abandonarán”, dijo en videoconferencia durante una plenaria del Parlamento Europeo.

Ayer, Zelenski firmó la demanda formal de adhesión de Ucrania al bloque comunitario mediante un “procedimiento especial”.