Luego de las afectaciones causadas por grafitis plasmados en una zona arqueológica de Hidalgo, comenzaron los procedimientos penales para investigar los hechos.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia, en un pronunciamiento realizado conjuntamente con el gobierno de Hidalgo, reprobó los hechos registrados como un atentado al patrimonio cultural hidalguense.
Los grafitis se realizaron en el Montículo VI y el Monolito ubicado en la Plazoleta de la Zona de Monumentos Arqueológicos de Huapalcalco, por lo que iniciaron los procedimientos penales y administrativos de oficio, para investigar y determinar responsabilidades por los daños.