Cómo un “infierno” calificaron los aficionados del Atlas el encuentro contra el Querétaro, ya que un buen momento en familia se convirtió en una desgracia y momentos de preocupación, la barra de “Los Gallos Blancos” golpeo a hombre, mujeres, niños e incluso personas de la tercera edad, no importaba nada, solo que tuvieran algún distintivo del equipo contrario.
A puño limpio, con picahielos, sillas, cinturones, tubos y cuanto objeto encontraban, era utilizado para agredir a los rivales, quienes corrieron por donde pudieron para evitar las agresiones, incluso tuvieron que cambiarse o quitarse la ropa que los definía como aficionados para evitar las agresiones, mismas que no cesaban, aunque la personas ya se encontraban inconscientes.
“Nos tuvimos que cambiar de ropa porque saliendo si traíamos camisa del Atlas nos iban a linchas, nos dijeron que nos iban hasta matar, fue en cuestión de segundos que donde voltearas estaban golpeando a toda la gente del Atlas”
