Bajo el argumento de combate a la corrupción, en 2019 el gobierno federal eliminó la participación de distribuidores de medicamentos y para la compra consolidada convocó a la Oficina de las Naciones Unidas de servicios para proyectos (UNOPS), pero en octubre pasado, concluyó anticipadamente el contrato con UNOPS, que originalmente estaba firmado para 2024 y anunció que el Instituto de salud para el bienestar INSABI, entregaría los fármacos directamente.
Aunque ya inicio febrero, la compra consolidada de medicamentos 2023-2024 para 33 instituciones de salud, no ha concluido, entre las claves desiertas destacan 8 medicamentos controlados para atender dolor crónico, o padecimientos psiquiátricos, pendientes tratamientos contra cáncer, hematológicos, e hipertensión arterial
El cuadro básico o compendio nacional de insumos para la salud se compone de dos mil 900 claves, de las cuales el IMSS consumo anualmente, solamente 900, lo que genera un desabasto generalizado
“Normalmente una compra consolidada, se completaba con 800 claves y me parece que es la apuesta más hacer más eficiente el abasto hacia 2023 y 2024 identificado 415 puntos en todo el país de 33 instituciones”
Enrique Martínez, Director general del Instituto farmacéutico INEFAM, explico que en la compra consolidada de INSABI fueron convocadas 639 claves, de las cuales se adjudicaron 505.6 millones de piezas, que representan un volumen del 91.5 por ciento del total convocadas, con un valor que rondará más de los 20 mil millones de pesos repartidos entre 72 proveedores.
“Regresan los distribuidores, son 95, estamos en revisión para saber cuántos laboratorios están atrás, esperamos que superen los 200 laboratorios, este proceso es una licitación abierta internacional, la verdad es que hablar de 484 claves estamos lejanos, el sector publico requiere cerca de mil 700 claves de medicamentos”
Ante las compras bianuales ya se está permitiendo la entrada y la oportunidad de empresas de distribución, es una buena noticia para todos los derechohabientes que están esperando ver si la próxima vez que vayan a la institución pública van a poder tener sus medicamentos disponibles
Sin embargo, México vive un desabasto generalizado de medicamentos en clínicas y hospital del sector salud debido a múltiples fenómenos y pretextos, atribuidos a la corrupción, la pandemia por covid y la austeridad y algunos pretextos de ineficiencia administrativa
“Instituciones también tienen modificaciones en sus prioridades terapéuticas que están licitando a sus necesidades terapéuticas de hoy y en 2024, si hay algún brote, si hay algún repunte, esas condiciones de decir, ya, ya tengo contratos hasta el 2024, a mí no me son vientos favorables”
De acuerdo con José Carlos Ferreira, Presidente del Instituto Farmacéutico, INEFAM, es muy probable que se registren problemas a partir de contratos a dos años, ante el compromiso de abastecer de medicamentos, material de curación a las instituciones públicas por 24 meses, con las condiciones prevalecientes el día que estás ganando el contrato
“Si el tipo de cambio se ve afectado, si materias primas se encarecen, si vuelven a cerrar las fábricas en la India, en la China, y tú tienes que enfrentar al cambio para la producción, importación, fabricación, de los medicamentos con los que están sometido al contrato, muy difícilmente, vas a poder cumplir”
Puede ser que se genere también más desabasto, las condiciones comerciales pueden cambiar, entonces vamos a seguir viendo, los próximos 24 meses, que se van a seguir exacerbando las adjudicaciones directas por la posibilidad de cumplir
“Que le esté permitiendo a los distribuidores que entren es un muy buena noticia, no descarto que todos estos nuevos jugadores, no son conocidos, no sabemos cuál es la representación legal, su estatus, con contratos, una empresa con contratos de 6 mil 194 millones de pesos, una empresa que se llama Yarent, no sé si tenga la logística, el expertix, el personal”
Recordar que para la segunda ronda de la compra consolidada de medicamentos e insumos para la salud 2023-2024 se reportó un volumen desierto de casi 28 millones de medicamentos y material de curación, lo que significa que el Instituto de Salud para el Bienestar INSABI no adquirió medicamentos como la vincristina, tratamiento para cáncer; misoprostol en óvulo o tableta, supositorios de paracetamol, naproxeno, en presentación suspensión oral, también faltarán cápsulas de ácido acetilsalicílico o aspirina y materiales como vendas y suturas.
El Insabi también reportó que no se consiguió fórmula para lactantes en polvo o líquido.
Otras tabletas que no pudieron conseguirse con azitromicina, ivermectina, metoclopramida, clindamicina inyectable, solución inyectable de heparina y lidocaína en gel.
