El disgusto de una parte del público por la representación de La Última Cena con Drag Queens durante la ceremonia de apertura de los Juegos de Verano en París no sólo se mantiene, sino que eso llevó a que el director artístico de la gala, Thomas Jolly, recibiera amenazas de muerte.
Ahora, la Fiscalía de París confirmó que se abrió una investigación por incitación al odio; en tanto, la Oficina Central de Lucha contra Crímenes contra la Humanidad y Crímenes de Odio de Francia, tomó la denuncia de Thomas Jolly, que fue interpuesta desde el martes, es decir cuatro días después de la ceremonia de apertura.
Lo que dijo la víctima es que ha sido “objeto de mensajes amenazantes e insultos en las redes sociales que critican su orientación sexual y sus raíces erróneamente asumidas como israelíes”.