Este viernes el gobierno de Estados Unidos corrigió su versión sobre el ataque realizado con drones en Kabul.
El general de la Marina Frank McKenzie, jefe del Comando Central de Estados Unidos, informó en conferencia de prensa desde el Pentágono, que el ataque fue un “trágico error”, ya que en él murieron varios civiles de Afganistán, y uno un extremista del Estados Islámico como se informó desde un principio.
Cabe señalar que diversas organizaciones pusieron en duda la versión del gobierno de Estados Unidos, e informaron que el conductor del vehículo atacado era un empleado de una organización humanitaria estadounidense, y señalaron la falta de pruebas que respaldaran la declaración del Pentágono en el sentido de que el vehículo contenía explosivos.
Al respecto, McKenzie aseguró que el vehículo fue atacado bajo la creencia de que representaba una amenaza inminente.
Sin embargo, el funcionario del Pentágono mencionó que ahora están convencidos de que en el ataque perdieron la vida 10 civiles, entre ellos 7 niños, además de que es poco probable que el vehículo y los fallecidos estuvieran relacionados con el ISIS-K.
Asimismo McKenzie ofreció una disculpa y agregó que el gobierno de Estados Unidos analiza la posibilidad de pagar una indemnización a los familiares de las víctimas.