El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, fue diagnosticado con cáncer de piel tras ser ingresado en un hospital de Brasilia por problemas renales y anemia.
La información fue confirmada por su cirujano Cláudio Birolini, jefe del equipo médico que supervisa su salud, una semana después de que el exmandatario fuera condenado por intento de golpe de estado.
Según el parte médico, el domingo pasado Bolsonaro acudió al hospital para realizarse exámenes de rutina, durante los cuales le extirparon ocho lesiones cutáneas. Tras las biopsias, se confirmó la presencia de carcinoma de células escamosas “in situ” en dos de esas muestras, una forma temprana y superficial de cáncer de piel.
El carcinoma de células escamosas se origina por daño acumulado en el ADN, comúnmente provocado por la exposición prolongada a radiación ultravioleta. Aunque es considerado un estado inicial, requiere seguimiento y tratamiento para evitar que invada tejidos más profundos.
Entre los síntomas más comunes se encuentran manchas rojas, ásperas o escamosas; llagas que no cicatrizan; protuberancias que pueden sangrar o formar costras; crecimientos similares a verrugas, y cambios en lunares o pecas preexistentes.
El exmandatario de 69 años permanece bajo observación médica mientras continúa su proceso legal y enfrenta un complejo panorama de salud, marcado ahora por este nuevo diagnóstico.






