Desde el Zócalo capitalino, la presidenta Claudia Sheinbaum insistió que México no regresará al modelo neoliberal, “ni al régimen de autoritarismo y fraudes, de corrupción y privilegios, no dejaremos que regrese la decadencia del pasado donde se gobernaba para unos cuantos y no había diferencia”.
En su Informe a 100 días de su gobierno, aprovechó para enviar un mensaje a sus opositores: “hoy les digo a quienes piensan que las mujeres no tenemos iniciativa propia, que por nosotras piensan otros, a quienes afirman que las mujeres no gobernamos, les decimos: así como llevamos un hogar, así como somos madres y abuelas, también tenemos la fuerza, la entereza, el temple y la capacidad para ser bomberas, ingenieras, astronautas, doctoras, abogadas y comandantas supremas de las fuerzas armadas”.
La Jefa del Ejecutivo, dijo que “los recursos para el bienestar y el desarrollo del país, seguirán aumentando, gracias a la austeridad republicana y a la erradicación de la corrupción en cualquier lugar donde todavía exista. No habrá privilegios en el pago de impuestos y derechos. Nadie ni nada, por encima de la Constitución”.
Por ello, informó que “las y los servidores públicos de confianza de alto nivel del gobierno, no tendremos incrementos salariales durante el sexenio”.
Finalmente, enfatizó que se han ampliado los programas sociales hoy convertidos en derechos sociales para el bienestar, porque ahora “el dinero que antes se robaban o lo usaban para compra del voto o se entregaba a unos cuantos, hoy se distribuyen para el beneficio del pueblo de México. El recurso del pueblo se le regresa al pueblo de manera directa, sin intermediarios”.