Con el objetivo de combatir la distracción tecnológica y fomentar la concentración en el aula, autoridades del Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles, en Estados Unidos, anunció la prohibición de algunos dispositivos.
La medida que se aplica a partir de este mes en escuelas intermedias y secundarias, es para teléfonos, relojes inteligentes y otros dispositivos que permitan comunicación o acceso a internet.
Los teléfonos permanecerán fuera del alcance en todo momento durante la jornada escolar, incluidas las pausas para el almuerzo y los descansos entre clases.
La normativa cubre desde que suena la campana de entrada hasta la campana de salida, aunque se permitirá el uso de los teléfonos en el trayecto hacia o desde el plantel.
Alrededor de 50 escuelas dentro del distrito —de un total de mil 543— ya habían adoptado prohibiciones similares, pero ahora la política se extenderá de manera uniforme al resto de los planteles, con la excepción de las escuelas primarias, donde por lo general los estudiantes no cuentan con dispositivos móviles.
