Durante la pandemia del Covid-19, los casos de enfermedades de transmisión sexual aumentaron en Estados Unidos.
De acuerdo con un informe de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, los casos de ETS notificados disminuyeron durante los primeros meses de 2020 a raíz de los confinamientos y el distanciamiento social, pero resurgieron a finales de año.
Los factores a los que se atribuye el incremento incluyen la reducción de la frecuencia de atención médica presencial, lo que se tradujo en menos exámenes de detección; el traslado de trabajadores sanitarios dedicados a las ETS para responder a la pandemia; la escasez de suministros de laboratorio y pruebas de ETS y las pausas en el seguro de salud por el desempleo.
Más de la mitad de las ETS fueron detectadas en edades entre 16 y 24 años.
En 2020, los casos notificados de gonorrea y sífilis primaria y secundaria subieron 10 y un 7 por ciento, respectivamente, en comparación con 2019.
La sífilis en recién nacidos, conocida como sífilis congénita, también aumentó, con casi 15 por ciento más de casos reportados desde 2019 y 235 por ciento desde 2016.
Los casos registrados de clamidia disminuyeron 13 por ciento desde 2019, pero los expertos sospechan que el dato puede ser engañoso debido a que la enfermedad es a menudo asintomática y se detecta mediante exámenes como la prueba rutinaria de Papanicolau.
