La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, llamó a tender puentes y no muros; y a generar contranarrativas a la intolerancia, al odio y al racismo, por lo que el compromiso por parte del Estado mexicano de trabajar para que desaparezcan la discriminación, el racismo, la xenofobia y los crímenes de odio.
“La nueva política de Estado tiene como punto central la atención constante a los grupos más vulnerables como las comunidades indígenas que sufrieron durante siglos discriminación sistémica”.
Al participar en el Foro Mundial contra el Racismo y la Discriminación organizado por la Unesco, la funcionaria consideró que la construcción y ejecución de una política antirracista requiere de alianzas institucionales con sociedad civil y con personas involucradas