Conacyt alerta de riesgos para la seguridad alimentaria de México y a nivel mundial

Foto: Sader

En el marco del Día Nacional del Maíz, la directora del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) María Elena Álvarez-Buylla, afirmó que la adhesión de México a diversos instrumentos internacionales como el que promueve la Unión Internacional para la Protección de las Obtenciones Vegetales (UPOV), implica un riesgo para la seguridad alimentaria mundial.

“México produce aproximadamente el 15 por ciento de los alimentos de origen vegetal que llega a las mesas de todo el mundo; y por ello el énfasis de este tema relacionado con la seguridad alimentaria global, todo ello convierte a nuestro país en un reservorio de la diversidad genética de estas especies”, explicó la titular del Conacyt.

Al inaugurar el Webinar “Instrumentos nacionales e internacionales en materia de obtenciones vegetales y sus consecuencias para la riqueza biocultural de México y la bioseguridad de los cultivos genéticamente modificados”, informó que el 9 de agosto de 1997, por compromisos adquiridos por la firma y entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, México se adhirió al Acta 78 de la Unión Internacional para la Protección de Obtenciones Vegetales (UPOV).

En años recientes, han existido varios intentos para que el país se inscriba a la versión más recientes del Acta de la UPOV (1991), poniendo el derecho mercantil por encima de los derechos humanos, así como el interés privado por encima del público.

Asimismo, este foro se realiza a unos días, de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), determine el próximo 29 de septiembre el mantenimiento de la suspensión de siembra de maíz genéticamente modificado.