Capitalinos hacen largas filas con tal de probar los tacos de El Califa de León

(Foto: Alemao Luna)

Pese a ser una taquería con 56 años de tradición, El Califa de León está viviendo su mejor momento luego de que el pasado 15 de mayo recibió una estrella por parte de la Guía Michelin. Y es que esta distinción concede un alto prestigio a un restaurante, pues se le considera una cocina de gran nivel que usa ingredientes de la máxima calidad para preparar platos con sabores distintos.

En los últimos días, El Califa de León pasó de ser una modesta taquería con dimensiones de apenas de 6 x 4 metros, ubicada sobre la populosa y comercial avenida de San Cosme, en la colonia de San Rafael, a convertirse en un auténtico tesoro gastronómico para los amantes del taco.

Ahora quien quiera degustar estos suaves y jugosos tacos de bisteck, de costilla, chuleta, o la especialidad de la casa: la “gaonera”, tendrá que hacer filas; incluso de hasta hora y media por las tardes.

Sin embargo, al visitar el establecimiento, la mayoría de los comensales confesaron que no conocían este lugar, hasta que se viralizó en redes a causa del galardón. 

“Porque mi esposo los vio por el Tiktok y por la cuestión esta de que tienen la estrella Michelin y que son muy buenos […] Ya llevaba formada hora y media, casi dos”, así lo dijo a 88.9 Noticias la señora Caty, quien se trasladó desde Iztapalapa para probarlos.

“Me voy a pedir cuatro, que valga la pena la espera y la venida”, agregó.

En cambio, el señor Francisco, quien afirmó que desde pequeño su padre lo traía a comer, señaló que la gran diferencia con otros negocios es la sencillez del platillo: una tortilla recién hecha a mano, un fino bisteck con limón y una pizca sal, sin nada de aceite

 “Su sabor, la salsa, la higiene que tiene el lugar […] Para mí es una combinación porque la tortilla la acaban de hacer, está recién hecha, eso también cuenta mucho y la carne está muy jugosa”, describió.

Aunque para otros nuevos clientes, es más publicidad que nada, asegurando que no es el mejor local de este rubro en la capital, de acuerdo con el joven Daniel, quien se asumió “experto taquero”:

“No me gustaron. Vi la preparación y todo y veo que le ponen este granito de sal, pero al momento que le das la mordida al taco pues sí se llega a sentir la sal […] Y la carne pues pensé que estaba mucho más suave, y no; sí tienes que morder fuerte. Yo le daría un 7 de calificación”

“No sé si por las prisas o porque hay mucha gente, me tocó la mala suerte de que me tocará la carne así. Pero hay que darles chance, que la gente venga, los pruebe y sean sus propios críticos”, señaló.

En cuanto a los precios, los más baratos son los de bisteck, de 53 pesos, y los más caros de costilla, de 82. Si bien el costo es elevado al promedio, son accesibles al comparar los platillos con los de Pujol o Quintonil, dos de los restaurantes con estrella Michelin en la CDMX. 

Un compromiso con los clientes

Al respecto, don Mario Hernández, uno de los propietarios de El Califa de León, se dijo sentirse muy orgulloso por esta distinción que, ahora, los compromete a mantener el alto nivel en ingredientes, preparación y sabor; aunque por ahora no tiene planeado expandirse.

No obstante, evitó calificar su taquería como la mejor de la Ciudad de México, pues no duda en que los próximos años más establecimientos de este tipo puedan conseguir una estrella Michelin. Por ello, recomendó a un par de establecimientos.

 “Nos orilla a comprometernos aún más con nuestros clientes, que ellos nos han sido los que nos han catapultado para poder ganar este premio […] Todo paladar es muy diferente. Hay muchos que nos pueden pelear el puesto, pero hay dos muy importantes para mí: uno que se llama Mesón Taurino, que está en Azcapotzalco, y el otro se llama Mesón Taurino, que está en avenida Revolución”, sugirió.

El Califa de León tiene servicio de lunes a domingo, en un horario de 11:00 de la mañana a 02:00 de la madrugada.