El domingo 15 de enero entraron en vigor nuevos cambios en la Ley General para el Control del Tabaco, que principalmente incluyen más y nuevas restricciones para fumadores y reglas para centros de entretenimiento, consumo de alimentos, así como en materia publicitaria.
Estos cambios amplían los espacios cien por ciento libres de humo de tabaco en cualquier lugar de trabajo. Espacios de concurrencia colectiva como plazas, parques, playas, estadios, así como en el transporte público y las escuelas en todos los niveles educativos, incluidas las universidades.
Destaca que tampoco se pude fumar en lugares de consumo o servicio de alimentos o bebidas, es decir bares, restaurantes y similares.
Durante un recorrido, observamos que en la zona centro del capital, las tiendas formales dejaron de exhibir los cigarros, es parte de las nuevas normas, no así lo pequeños puestos de dulces que siguen vendiendo cigarros sueltos, situación que también está prohibida, aunque aceptan que es un producto muy solicitado, además en la Alameda Central, uno de los parques púbico más emblemáticos de la capital, se sigue fumando sin problema cuando por la nueva normatividad ya no debería estar permitido.
En el centro histórico -una zona de mucho turismo de mucho comercio y gente los domingos- preguntamos también a los fumadores qué opinan de estas nuevas restricciones, principalmente sobre los lugares como bares, restaurantes y cantinas que aunque tengan terraza para fumadores ya no podrán fumar dentro del establecimiento.
“Estoy completamente de acuerdo. Soy de los fumadores que si alguien fuma junto a mí me molesta, no me importaba mucho si ya no se puede fumar dentro de estos negocios…tenemos esa costumbre, por ejemplo tu ibas a lugares porque tenían terraza para fumar, luego me metía a los restaurantes porque tenían zona para fumadores creo que ya no los voy a frecuentar”, señalaron dos consumidores de tabaco.
En este recorrido que realizamos por la zona de restaurantes, bares, cantinas, y negocios similares en el centro histórico observamos que en los locales con terraza no había gente fumando.
Preguntamos a los trabajadores si consideran que esto puede afectar a los negocios por la nueva restricción, la mayoría aceptó que en los lugares donde la gente acude a beber alcohol sí es común que busquen la terraza para fumar sin embargo también destacaron que los comensales ya están acostumbrados a salirse a fumar y después regresan aunque a veces se algo incómodo para los clientes.
“Si porque muchas veces te piden la terraza para poder fumar sobre todo en los lugares que venden bebidas alcohólicas…yo creo que si afecta un poco por que el comensal cuando te pide la terraza es porque busca fumar…creo que si afectará a muchos les gusta estar tomando y fumando al mismo tiempo…ya saben que no pueden fumar; se salen, se fuman su cigarro regresan”, indicaron diversos meseros de varios comercios.
Con las nuevas normas que restringen más el consumo del tabaco en lugares públicos y su venta y exhibición, se buscan reducir el consumo, en México cifras de la secretaría de salud federal indican que hay cerca de 16 millones de personas fumadoras y cada día fallecen más de 173 personas por enfermedades asociadas al tabaquismo.