Los megaproyectos inmobiliarios continúan en expansión en la Ciudad de México y con ello las quejas de los vecinos por la sobreexplotación del agua en estos desarrollos, además de las afectaciones ecológicas en la capital.
Tal es el caso del proyecto Fuentes Brotantes 134, en la alcaldía Tlalpan, que ha provocado manifestaciones de los habitantes de la zona, que han denunciado la múltiple tala de árboles para la construcción de 50 casas de lujo.
“A los bosques de la ciudad los quieren desaparecer, nosotros con lucha y sangre los vamos a defender”, exigieron recientemente en una protesta los vecinos.
Pero el problema se encuentra en otras alcaldías como Iztacalco, en la que hay un litigio por la construcción en Río Churubusco 213. Su edificación se reanudó por el fallo de un juez para la construcción de 904 viviendas, mil 028 cajones de estacionamiento, locales comerciales y una zona corporativa en la Colonia Granjas de México.
Los vecinos de Iztacalco han mostrado su rechazo por problemas de agua, daños en sus viviendas y problemas en su salud.
En la alcaldía Miguel Hidalgo también existía el intento por desarrollar un megaproyecto inmobiliario, en Palmas 915, el cual tendría graves repercusiones en la zona; no obstante, recientemente la Secretaría de Planeación, Ordenamiento Territorial y Coordinación Metropolitana determinó que no cuentan con los permisos para esta edificación.