Con el objetivo de atender las quejas ciudadanas generadas por irregularidades en el funcionamiento de “chelerías” y bares ubicados en la Alcaldía Tlalpan que encabeza Alfa González Magallanes se implementaron, desde el ocho de octubre pasado, diversos operativos que derivaron en el retiro, clausura y suspensión de 40 de estos establecimientos de alto impacto.
Las primeras acciones se realizaron sobre la orilla de la carretera Picacho- Ajusco, donde se identificaron 22 locales en pequeñas cabañas que operaban viernes, sábados y domingos, algunas construidas con muros de tabique y otras de madera conocidas como “chelerías”.
Personal de la Dirección General de Asuntos Jurídicos y de Gobierno de la Alcaldía Tlalpan identificó que dichos establecimientos carecían de autorización, operaban desde hacía varios años, ocasionaban violencia en la zona, alteraban el orden público y provocaban congestionamiento vial al estacionar vehículos y motocicletas, prácticamente sobre toda la carretera.
En todos los casos se derribaron las construcciones y personal de la alcaldía mantiene guardia los fines de semana para así garantizar que la carretera Picacho-Ajusco se mantenga limpia de chelerías y libre de los problemas que por años se generaron en la zona.
Además de restablecer el orden, la zona hoy tiene una vialidad más ágil y se va recuperando el ambiente familiar para que las personas que vienen de otras alcaldías se diviertan sin tener problemas.
Por lo que se refiere al tema de bares, la Dirección General de Asuntos Jurídicos y de Gobierno explicó que una de las más sentidas quejas que se tenían al inicio de la administración se debía al funcionamiento de diversos bares en las colonias Prado Coapa, primera, segunda y tercera sección, Ex Hacienda San Juan de Dios y Residencial Acoxpa.
En estos casos la demanda ciudadana se centraba en que los establecimientos excedían el horario, exceso de ruido, no tener estacionamiento suficiente, que los operadores de valet parking estacionaban los vehículos en las calles de las colonias, además de que eran constantes las riñas entre los jóvenes asistentes.
Lo anterior, sin contar con los problemas generados en la zona por los llamados “viene–viene”, que exigían cuotas por el cuidado de los vehículos, así como la presencia de una serie de jóvenes con mochilitas que frecuentaban las inmediaciones de estos lugares, aparentemente con venta de productos prohibidos.
Al inicio de esta administración se revisaron diversos expedientes, en diversos casos los dueños de algunos bares subsanaron las irregularidades, sin embargo, 7 de estos establecimientos, denominados “Kali”, “La Lolita”, “The Flow”, “Bonanza”, “La Majadera”, “La Taquería” y “Botanero 33”, hasta la fecha no han acreditado contar con la documentación que ampare su legal funcionamiento, manteniéndose clausurados o con suspensión de actividades.
Asimismo, durante la semana del 12 al 18 de diciembre, se realizó la clausura de 11 establecimientos más ubicados en las colonias Lomas de Padierna, Héroes de Padierna, Cuchilla de Padierna, Carretera Libre México-Cuernavaca y Villa Coapa.
Como resultado de visitas de verificación a estos lugares, se procedió a la suspensión de actividades debido a que incurrieron en violaciones a la Ley de Establecimientos Mercantiles, pues la mayoría operaba sin los permisos correspondientes y/o en su caso expedía bebidas alcohólicas sin contar con la licencia correspondiente.
