Adriana Dávila y Jorge Romero protagonizaron el primer debate por la dirigencia del PAN en un intercambio de ideas y propuestas para reformar al partido de oposición. Coincidieron en la necesidad de una renovación, mientras que no faltaron los señalamientos y confrontaciones.
Jorge Romero aseguró que es necesaria una reforma estatutaria a través de una Asamblea Nacional Extraordinaria, así como permitir una afiliación inmediata de todos aquellos que quieran militar en el panismo y que el presidente nacional del PAN no pueda aspirar a un cargo de elección.
“Si yo llego a ser el dirigente lo primero que haría sería convocar a una Asamblea Nacional Extraordinaria para reformar nuestros estatutos y lo que hoy son propuestas de campaña no se las lleve el aire”.
Por su parte, Adriana Dávila cuestionó que todos los miembros de la planilla de Romero tienen un cargo, mientras que aseguró que más que reformar los estatutos es necesario un cambio de conductas y acercar al PAN a los ciudadanos.
“Hay millones de mexicanos que están esperando que les abramos la puerta, pero tenemos que empezar por reconstruirnos, es unánime, todos queremos un cambio, pero también queremos la unidad, pero no la que defiende cosas indefendibles, como acuerdos cupulares”
Ambos reconocieron que el blanquiazul pasa por una crisis y existen dos proyectos políticos en el partido, por lo que la militancia tendrá que decidir cuál toma las riendas del partido el próximo 10 de noviembre.