El español Rafael Nadal aceptó que hace algunas semanas estuvo cerca de despedirse del tenis, algo que dejó en claro nunca le ha dado temor ya que es un proceso natural y que un día llegará.
“Mi filosofía es que hace unas semanas estuve cerca de retirarme, ahora no lo siento así. Nunca me ha dado miedo ese día. Estoy feliz de que tengo una vida muy feliz fuera del tenis, aunque ha sido una parte muy importante de mi vida en los últimos treinta años. Tengo muchas cosas buenas fuera de eso”, dijo.
Nadal, quien logró su pase a la tercera ronda de Wimbledon al vencer al lituano Ricardas Berankis, manifestó que cuando se aleje de las canchas deberá aceptarlo como lo que es.
“Cuando llegue (el retiro), será un cambio y habrá que adaptarse a los cambios. Es normal es que la gente hable sobre los retiros porque los atletas han estado en lo más alto del deporte durante muchos años, son parte de la vida de la gente. Me pasa mí con futbolistas, con golfistas. Como con Tiger Woods, me gusta mucho y en los últimos años no he podido verle tanto”, estableció.
Por otra parte, el ibérico fue crítico con su juego al afirmar que ha ganado más partidos cuando juega mal, una constante que comparte con sus contemporáneos, el suizo Roger Federer y el serbio Novak Djokovic.
“La clave en este mundo del tenis, la gran diferencia que creo que hemos tenido tanto Federer, como Djokovic como yo mismo; no soy en ese sentido nada arrogante, pero si hemos hecho algo mejor que el resto es que somos los que hemos ganado más partidos jugando mal”, estableció.
Aseguró que esa “es la clave del éxito de los tenistas. Jugando bien, casi todo el mundo gana, porque las diferencias no son muy grandes. Cuando uno juega bien gana por inercia, la clave está en ganar cuando uno juega mal”.
“Cuando uno juega mal y pierde, no juega hasta la semana que viene. Si juegas mal y ganas, puede jugar bien el siguiente. Las victorias ayudan a jugar bien”, sentenció.
Por Ricardo Blancas Avalos e imagen de MEXSPORT