El entrenador del PSG, Luis Enrique, aseguró que su equipo fue “infinitamente superior” al Atlético de Madrid en el cuarto partido de la fase de grupos de la Liga de Campeones de fútbol y atribuyó la derrota a la mala suerte.
“No tengo palabras. Creo que en los tres partidos que hemos jugado en nuestro estadio (Girona, PSV Eindhoven y Atlético de Madrid) hemos sido infinitamente superiores a nuestros adversarios y no hemos tenido suerte”, dijo el técnico a la televisión Canal Plus.
“Llevo 30 años en el fútbol y no consigo explicar esto. Es mala suerte. Hemos sido infinitamente superiores a nuestros adversarios”, dijo el entrenador español, que no quiso valorar si al equipo le falta un delantero centro.
Luis Enrique señaló que no se rinden: “Mientras que tengamos partidos por delante vamos a luchar”.
En conferencia de prensa, el técnico español reconoció que “sin ninguna duda” hay riesgo de que el PSG quede eliminado en la competición ante la dinámica negativa en la que está el equipo en Europa.
“Si la dinámica es ésta,… Desde el principio esta competición ha empezado torcida, con un sorteo anormal para un equipo del bombo 1 y nuestros argumentos no han sido suficientes. Teníamos que haber ganado los tres partidos en casa fácil y hemos empatado uno, perdido otro y ganado uno con un error de su portero en el último minuto”, dijo.
“Con esta dinámica no puedo garantizar que vayamos a clasificarnos”, insistió el técnico asturiano, que prometió pelear hasta el final y “afrontar los cuatro partidos que quedan como cuatro finales”.
“Si no nos clasificamos se tomarán las medidas que se tengan que tomar. No estoy en el fútbol porque tenga miedo, siempre voy hacia adelante hasta el último minuto”, aseguró Luis Enrique, que defendió la actuación de sus jugadores y se hizo responsable de los resultados.
“El responsable de crear en tres partidos 50 ocasiones es el equipo y el responsable del equipo es el entrenador. Si no se consiguen resultados el responsable soy yo. Es difícil explicar esta racha”, insistió.
Luis Enrique consideró el gol de Correa en el último instante como “una broma” y dijo que el de hoy fue “un día de mierda”, pero se comprometió a comenzar a trabajar a partir de este jueves para cambiar la dinámica.
El técnico consideró que la incorporación de un delantero para paliar la falta de eficacia anotadora no es la solución y dijo que “no lo hay en el mercado”.
“Soy fiel a mis ideas, el día que fracase será con ellas, son las que me han traído aquí las seguiré llevando a cabo. No tengo duda de que es el camino adecuado. Esta racha es inverosímil, inaudita. Pero el fútbol no premia las ocasiones, premia los goles. Tenemos que mejorar, yo el primero”, comentó.
Con información de EFE e imagen de AndreaA/Depositphotos.com