A cinco meses del asesinato de los sacerdotes Javier Campos Morales El Gallo y Joaquín Mora Salazar, junto con el guía de turistas Pedro Palma, los Jesuitas de México reclamaron que el caso siga impune y la inseguridad prevalezca en la Sierra Tarahumara.
A través de un comunicado, lamentaron que se mantenga la violencia que cobró la vida de sus compañeros en Chihuahua, el pasado 22 de junio.
Destacaron que “la paz no ha llegado a Cerocahui, como recientemente declaró la Secretaría de Seguridad Pública Estatal” y agregaron que hay miedo de que la situación quede en el olvido y de que el agresor regrese a la zona.
Hicieron un llamado a los diferentes niveles de gobierno para continuar con la seguridad en el territorio serrano y avanzar hacia la justicia.